Con motivo del 8 de marzo os presentamos la exposición fotográfica realizada en nuestro centro INDARTUZ. En ella podemos ver la evolución del feminismo a lo largo de los años. Hoy, el feminismo en nuestra sociedad es imprescindible y necesario. Nosotros, el educador, tenemos que hacer que nuestros colaboradores formen parte de este proceso.

Foto nº1. Primera manifestación feminista hecha en Londres, en 1903
Fotos nº2 y nº3. Manifestación de sufragistas en 1935, París. Y llena de reivindicaciones de justicia.

Por muy poco se cuenta con los dedos de una sola mano a las mujeres que presiden un lejano y remoto siglo XVIII. La primera imagen que inicia esta exposición, aunque pequeña, fue el comienzo de muchas otras en que, con energía y fuerza, muchas se unieron a esas primeras combatientes en un movimiento necesario e imprescindible. Gracias a esa primera aparición, hoy puede y debe florecer en todo su esplendor.

Foto nº4. Marcha de las mujeres en Washington D.C., el 21 de enero de 2017..

Esos primeros pasos y primeras voces resuenan en el grito lleno de rabia y euforia de la joven que se alza en la multitud con un lema claro, directo y preciso. Ella es capaz de hablar con ellas y por ellas; como si fuera una explosión, levanta el cartel y en él podemos leer una sola palabra, Women, acompañada de un punto espectacular. Sí, eso es, esto viene de nosotras, nosotras estamos aquí, y aquí y ahora se nos oirá

Foto nº5. Movilización de mujeres en Nepal, para reclamar sus derechos, 2017.
Foto nº6. Manifestación de mujeres tras el asesinato en Juárez de Isabel Cabanillas, México, 2020.
Foto nº7. Marea violeta, marzo, en Valencia.

Y desde la televisión llegar al colectivo, escuchar el grito, interiorizarlo a través de gestos de colaboración, de diferentes iniciativas y de actividades de diferentes movimientos. Para conseguir con trabajo un objetivo complejo, que no se puede quedar en el descuido.

Foto nº8. 7 de marzo de 2021, Quito, Ecuador.
Foto nº9. 9. argazkia.
Foto nº10. Buenos Aires, Argentina, 2016.

¿Y qué pasa cuando deciden que ELLAs son suficiente y establecen que es hora de dar un paso al frente? ¿Qué ocurre cuando la indignación ahuyenta la obediencia y aparece en el cuerpo de una mujer con letra rojiza? ¿Qué pasa cuando la desesperación limita el conformismo y hace estallar de rabia a las mujeres, que lanzan dardos llenos de razón y de sentido con ironía y sabiduría? ¿Y qué ocurre cuando el dolor y la desesperación de la muchacha que lleva un letrero la empujan a la más nefasta obediencia y desesperación? Que cambian las cosas, se destruyen las malas conductas y se educa en construir un mundo nuevo.

Fotos nº11 y nº12. Marcha de las mujeres de 2018, New York City.

Y ese nuevo mundo que se persigue sólo llegará a través del trabajo, la obstinación y la tenacidad, no sólo de estas de ahora, sino también de las nuevas generaciones que tendrán que tomar el relevo, y no sólo de ELLAS, porque los hombres, como parte indispensable de esta encrucijada, deben aportar, aportar y trabajar, para poder alcanzar el fin que nosotras deseamos.

Foto nº13. 8 de marzo de 2018, BIlbao.

Y por último, ¿qué decir? Las palabras “sobran”. Si al principio veíamos la imagen de esas 6 valerosas mujeres, ahora todas ellas y muchas más, nos levantamos, luchamos y trabajamos cada día sin descanso para cambiar todo lo que queremos.